¡Hola, chic@s!
¿Qué tal va la semana? Bueno, ya estamos a miércoles, queda menos que nada para que llegue el finde... Y si queréis empezarlo bien, aquí estoy para traeros una manicura que es muy potente pero que a mí me encanta ahora que está empezando el frío.
Vamos a ver cómo se hace...
1.- Primero de todo, uso una cremita para retirar las cutículas que me encanta...no dejo de usarla porque me deja las uñas límpidas a más no poder, y luego al aplicar los esmaltes se ve la uña despejada y sana, ¡qué descubrimiento!
Es de la marca Kaeso, tiene 195 ml. y vale 3,20€ en www.maquillalia.com
2.- Después, aplico una base que varía según lo que busque: o bien endurecedora o bien blanqueante o lo que necesitéis...
3.- Después aplico el color base, en este caso el Saucy Polish de Eyeko. Es un rojo que me encanta, es brillante, tiene un acabado muy liso, es muy fácil de aplicar, no hace burbujitas...una maravilla.
4.- Aplico el
esmalte craquelador en color negro de Essence. Tiene
acabado mate y hay que aplicarlo en una capa espesita para que "rasgue" de esta forma. Si lo que queréis es que quede como "a rayitas más finas", con aplicar una capa muy finita del esmalte, perfecto. Yo lo prefiero así.
5.- Como a mí no me gusta el acabado en mate sobre el brillo, pues lo que hago es aplicar una
capa de esmalte transparente secante de NYC.
¡Y listo! Qué os parece? Para mí es una
manicura de "rompe y rasga" que me chifla. Cambiando el tono de base, pues tendremos una manicura totalmente diferente.
Podéis probar a pintar un color en cada uña y luego unificarlos todos con un craquelado en negro, es otra opción.
¿Cómo usáis ustedes estos top coats?
Un saludito!
