¿Cómo llevamos la semana?
¡Ya es viernes! Por fin... ¡viernes!
¿Ustedes para qué usáis los fines de semana?
Familia, amigos, relax en casa, belleza, compras... ¡ays! ¡ahí le he dado! Jajajajaja
Pues yo os traigo hoy
una entrada algo mixta y es que, voy a hablaros de una
tendencia de este
otoño que me gusta mucho y son
los metalizados.
Por un lado, me ha llamado mucho la atención la
tendencia en zapatos en formato blúcher y metalizado: de por sí, este tipo de zapato es muy masculino, así que, habrá quien habrá pensado: "vamos a meterle caña y lo vamos a hacer en plena tendencia metalizada para que se venda entre las fashionistas...".
Y claro, le metes a
Olivia Palermo el zapato en cuestión y ya lo tienes vendiéndolo como churros entre blogueras y fashionistas del mundillo.
Aquí tenemos a nuestra compañera del
blog Miss Cosillas, que hizo una entrada estupendísima sobre esta
tendencia de zapatos... ir corriendo a verla, pero
no os encaprichéis, que los zapatos de Zara, ya no están en venta... (argh!) mirad, mirad
aquí
Así que, cuando vi esta entrada pensé: esta tendencia tengo yo que exponerla en mis manitas, ya que no soy tan atrevida como para ponerme este tipo de zapatos...
Y aquí estoy, con esta
manicura metalizada que me encaaaaaanta...
¿Qué os parece?
¿Vamos a verla paso a paso?
Pues como siempre, sabéis que hay que usar un
esmalte protector para evitar dañar la uña y para que el proceso de esmaltado sea más limpio y quede sin estrías...
4 in 1 de Flormar, ya sabéis que es el que uso últimamente...
Luego ponemos una
capita del esmalte metalizado en sí: yo usé uno de una
edición limitada de Essence, el Hide Bella Hide, de la colección Twilight que sacaron, si no recuerdo mal, cuando salió la segunda peli, Luna Nueva. Es un gris metalizado puro, no vira a nada, ¡a gris!
No queda nada trasparentoso, la verdad, tiene una cobertura fantástica, pero aún así, ya sabéis que yo siempre uso dos capas, y así queda...
Es precioso, ¿a que sí?
Una vez tenemos las
dos capas bien secas (yo no sé si será por el efecto metalizado, pero tardó relativamente poco tiempo...), cogemos un
esmalte negro que tenga pincel fino para hacer rayitas, en mi caso, usé uno de la edición limitada
I love Berlin de Essence.
Con él, hacemos
tres líneas verticales desde el inicio de la uña hacia abajo: una en el centro para guiarnos y las otras dos a la mitad hacia el exterior de la uña.
Yo hice este dibujo en todas las uñas
excepto en las de los dedos anulares.
En estas últimas quise hacer un
dibujo tipo manchas de leopardo (aunque a la niña de mi jefa le parecieron labios dando besitos... ¡candor e inocencia en su estado más puro, qué maravilla!). Para ello, usé el
basiquísimo Black in black de Sinful Colors, que pigmenta como ninguno otro que haya usado.
Con un
pincelito intentamos hacer el diseño que hemos elegido (en la uña de la mano derecha, con poco éxito, la verdad, por eso es que nunca la enseño, jajaja).
Una vez esté seco, y bien seco, y más seco aún (tuve que volver a empezar porque me llevé todo el esmalte y emborroné toda la manicura, por eso lo digo...) sellamos con un
top coat secante y listo...
¿Qué os parece? ¿Creéis que cumple con la tendencia metalizada?
¡Un saludito!